“Un problema es una oportunidad para que hagas tu mejor esfuerzo.”
Duke Ellington

El piano es un instrumento musical armónico, clasificado como instrumento de teclado y de cuerdas percutidas por el sistema de clasificación tradicional. Fue inventado en torno al año 1700 por el paduano Bartolomeo Cristofori. Pausa
Está compuesto por una caja de resonancia, a la que se ha agregado un teclado mediante el cual se percuten las cuerdas de acero con macillos forrados de fieltro, produciendo el sonido. Las vibraciones se transmiten a través de los puentes a la tabla armónica, que las amplifica.

El piano ha sido un elemento integral del idioma del jazz desde sus comienzos, tanto en interpretaciones como solista o en conjuntos musicales. Su rol es multifacético, en gran parte debido a la naturaleza del instrumento que combina aspectos melódicos y armónicos. Por esta razón es también un elemento importante en la comprensión de la teoría del jazz y sus arreglos por parte de músicos y compositores.


El primer pianista de jazz de cierta importancia fue Scott Joplin, conocido como el Rey del Ragtime y estableció el piano como instrumento primordial en la historia del jazz. Jelly Roll Morton, uno de los primeros gigantes del jazz, fue el primer gran compositor de jazz propiamente dicho de la historia, y muchas de sus obras están aún hoy consideradas por la crítica entre las más importantes de la historia del género.

Hoy vamos a disfrutar del rey de los instrumentos... El Piano y el Jazz.


Duke Ellington Meets Coleman Hawkins, Impulse 1962. Fue el encuentro largamente pospuesto de estas dos luminarias del jazz. El disco es una exquisitez que desde aquí os recomendamos vivamente que escuchéis.

“Limbo Jazz”, canción que acabamos de disfrutar. Es una introducción infecciosa a lo que resultó ser una cita informal pero completamente profesional. Este número similar a un calipso fue, de hecho, concebido de manera bastante espontánea a la mitad de la sesión, aunque sea el primer corte del disco.



Habiendo calculado la melodía y el tempo con Aaron Bell y Sam Woodyard, Duke Ellington llamó a los otros vientos para desarrollar la rutina mientras Coleman estaba cambiando una caña a su saxo. Afortunadamente, se registró la interpretación, aunque el canto completamente inconsciente de Sam Woodyard a lo largo de todo indica que él, como la mayoría de los demás, no estaban al tanto de que estaban siendo grabados. Duke, sin embargo, sabía lo que estaba sucediendo, y después de los solos de Johnny Hodges, Ray Nance y Lawrece Brown, hizo señas a su invitado para tomar un lugar de honor en la actuación. Terminando la canción con un coro de vientos perfectamente ensamblados.

Bud Powell, fue un pianista y compositor estadounidense de jazz, y una de las figuras fundamentales del bebop. Desde sus primeros años fue inducido al estudio del piano por su padre y muy pronto ya pudo interpretar composiciones de los grandes maestros de la música clásica. Su enfermedad mental lo aislara de los escenarios, debiendo ser internado durante 2 años en los que se le somete a sesiones de electroshock en un intento de revertir su esquizofrenia.



El 5 de mayo de 1953 participó junto con Max Roach, Dizzy Gillespie, Charlie Parker y Charles Mingus en un legendario concierto celebrado en Toronto Canadá. A partir de ese momento su salud entró en declive.

Aún tuvo momentos de lucidez para ir de gira junto con el Modern Jazz Quartet a Europa en 2 ocasiones, 1956 y 1959. En su último viaje al viejo continente permaneció durante 5 años en París donde formó un grupo bastante regular. Pausa
Hacia el final de su vida y aquejado por la tuberculosis y el alcoholismo regresó a Estados Unidos donde hizo apariciones esporádicas hasta su fallecimiento.

“Clepatra’s Dream”, tipifica el temperamento predominante; un brillante tema en tono menor , Bud Powell sin interrupciones nos desvela las claves de la canción, su melodía es una estructura simple y atractiva sobre una base tónica y dominante, sus improvisaciones fluctúan entre largas líneas de notas individuales.



Wynton Kelly nacido en Jamaica, su familia se traslada al distrito de Brooklyn, Nueva York cuando Kelly tenía tan sólo cuatro años. Es allí, ya adolescente, donde da comienzo su carrera profesional. Auténtico músico de sesión, trabajó con Dizzy Gillespie, Lester Young, Dinah Washington aunque fue su colaboración con Miles Davis la que le granjearía mayor reconocimiento musical por su participación en álbumes com Kind Of Blue y Someday My Prince Will Come entre otros.

Tras abandonar a Miles Davis forma su propio trío con el resto de la sección rítmica de la banda, el bajista Paul Chambers y el batería Jimmy Cobb. Rescatamos aquí una grabación para el sello Riverside del año 1959. El álbum se llama Kelly Blue, y la canción que vamos a disfrutar... “Softly, As In Morning Sunrise”

En palabras del gran Julio Cortázar...

“Ahora se apagan las luces, nos miramos todavía con ese ligero temblor de despedida que nos gana siempre al empezar un concierto (cruzaremos un río, habrá otro tiempo, el dinero está listo) y ya el contrabajo levanta su instrumento y lo sondea, brevemente la escobilla recorre el aire del timbal como un escalofrío, y desde el fondo, un oso con un birrete entre turco y solideo se encamina hacia el piano poniendo un pie delante de otro con un cuidado que hace pensar en minas abandonadas o en esos cultivos de flores de los déspotas sasánidas en que cada flor hollada era una lenta muerte del jardinero. Cuando Thelonious se sienta al piano toda la sala se sienta con él y produce un murmullo colectivo del tamaño exacto del alivio, porque el recorrido tangencial de Thelonious por el escenario tiene algo de riesgoso cabotaje fenicio con probables varamientos en las sirtes, y cuando la nave de oscura miel y barbado capitán llega a puerto, la recibe el muelle masónico del Victoria May con un suspiro como de alas apaciguadas, de tajamares cumplidos... Tres sombras como espigas rodean al oso investigando las colmenas del teclado, las burdas zarpas bondadosas yendo y viniendo entre abejas desconcertadas y hexágonos de sonido, ha pasado apenas un minuto y ya estamos en la noche fuera del tiempo, la noche primitiva y delicada de Thelonious Monk.”



Rescatadas de la memoria estas grabaciones del gran Thelonius Monk fueron recuperadas de la oscuridad del olvido el año pasado.

El director de cine Roger Vadim preparaba una adaptación cinematográfica de la novela de Chaderlos de Laclos, Las Amistades Peligrosas. Se puso en contacto con el productor Marcel Romano, que había trabajado anteriormente para el exitoso matrimonio de la música jazz y el cine con la película de Louis Malle, Ascenso para el Cadalso, que fue compuesta por Miles Davis. Los dos hombres decidieron confiar la banda sonora de la película al pianista estadounidense Thelonious Monk.

El 27 de julio de 1959, Thelonious Monk, entonces en la cima de su arte, grabó una selección de sus composiciones para su contribución única a la partitura de una película. La formación elegida por Monk en esta ocasión es completamente nueva, ya que a su cuarteto del momento compuesto por Charlie Rouse, Sam Jones y Art Taylor se une al saxofonista francés Barney Wilen, quien contribuye admirablemente al éxito de la sesión.
Señoras y señores... El Gran Thelonius Monk... "Well, You Needn’t"



Es en Art Tatum en quien confluye todo lo que se había logrado en el piano de jazz hasta la época en que se hizo famoso, esto es, a mediados de la década de 1940. Considerado como uno de los mayores talentos naturales que ha dado el jazz a lo largo de su historia, no es sólo que la impresionante capacidad técnica de Tatum le permitía ejecutar líneas y fraseos a dos manos que estaban muy lejos del alcance de cualquier otro pianista de su época, sino que las innovaciones armónicas del músico tardaron más de 30 años en ser asimiladas por el resto de sus colegas, que aún hoy, más de medio siglo después de su muerte, quedan sobrecogidos ante su increíble virtuosismo.

Ya era hora que un disco tan importante en la historia del jazz se deslizara discretamente por El Club del Vinilo. Aunque todas las composiciones del álbum son atribuidas a Miles Davis, las manos de Bill Evans en esta canción parece ser que fueron cruciales para que esta canción nos llegara a nosotros. El toque cálido y melancólico del pianista de New Jersey es absolutamente conmovedor.



“Blue In Green” nos enseña una sensibilidad, una visión introspectiva, un lirismo sereno, un sentimiento lleno de emoción y un toque de gran sutileza que el señor Evans poseía. El álbum, como no es Kind Of Blue de Miles Davis, Columbia Records, 1959.

Aprendió a tocar el piano a la edad de siete años y pronto se convirtió en un
prodigio, tocando como solista el primer movimiento de un concierto para piano de
Wolfgang Amadeus Mozart a los once años con la Orquesta Sinfónica de Chicago.

Se trata de una de las figuras que más opiniones encontradas suscita dentro del jazz contemporáneo. Es un artista inquieto estilísticamente que se ha dejado influir por casi todas las tendencias musicales de la segunda mitad del siglo XX.

No obstante, el estilo pianístico y de teclado son completamente suyos, con sus
propios rasgos armónicos urbanos y complejos, y sus ritmos particulares. Habiendo
estudiado ingeniería, estuvo siempre perfectamente preparado para la era
electrónica: fue uno de los primeros maestros en el piano eléctrico Rhodes y en el
clavinet Hohner. En todo caso, el piano ha sido siempre su instrumento preferido.

Con apenas 23 años empezó a tocar con Miles Davis.
Hablamos de Herbie Hancock. Abandonó a Davis en 1968 y grabó un disco de funk, Fat Albert Rotunda, Atlantic Records, 1969. Formó un sexteto que causó sensación. Fuertemente empapado de la era electrónica, añadió a su piano eléctrico y a su clavinet el sintetizador de Patrick Gleeson, y las grabaciones se volvierón más complejas rítmicas y estructuralmente, creando su propia visión de la vanguardia.


Seguidor de Art Tatum, se trata de un pianista acústico de gran técnica, con una destacable capacidad para tocar con velocidad y con una gran habilidad para el swing, independientemente del tempo de ejecución.

Su estilo, formado durante los años cuarenta como en el caso de otros pianistas como Erroll Garner y George Shearing, oscila entre el swing y el bop, y se engloba dentro de la tendencia tradicional del jazz.

Hoy nos despedimos con una versión del clásico de Bertolt Brecht y Kurt Weill, “Mack The Knife” interpretado en esta ocasión por el maravilloso y genial pianista llamado Oscar Peterson.



Comentarios

Entradas populares